SIERVO DE DIOS RAMÓN DONATE GÓMEZ

Asignado a la Parroquia Santa Justa de Orihuela.

Como prueba palmaria del "odium fidei" que caracterizaba a los perseguidores de nuestras víctimas sacerdotales es la elección de la fecha del sacrificio en la Vigilia de Navidad.

Cuando el mundo cristiano celebra con paz y alegría el nacimiento del Redentor evocando el canto evangélico de Paz en la tierra..., cuando incluso los no cristianos asisten respetuosos a participar (como en la India) en la fiesta mayor del "Dios de los cristianos", nuestros feroces asesinos, envenenados por el odio, eligen la tarde-noche del 24 de diciembre, cuando las campanas de todo el mundo repican a gloria para consumar su crimen...

¡Dios tenga misericordia de estos desventurados, y algún día arrepentidos puedan en el Cielo acompañar a sus víctimas...!

Una de ellas fue Don Ramón Donate Gómez, nacido en Orihuela en 1891, en el seno de una familia muy piadosa.

En tan sano ambiente, escuchó la llamada de Dios, ingresando en el Seminario y cursando los estudios con notable aprovechamiento.

Ordenado sacerdote, ejerció su ministerio en los primeros años como adscrito en la Parroquia de las Santas Justa y Rufina de Orihuela y capellán de la ermita de la Campaneta, cuidando pastoralmente de su caserío.

Por conveniencias familiares y personales, se trasladó e incardinó en la Diócesis de Málaga, en la que durante varios años ejerció el ministerio. Allí sufrió los incendios y saqueos de mayo de 1931, pues Málaga, en este aspecto, fue de las ciudades más castigadas de España.

Al estallar la revolución de 1936, se refugió en su ciudad natal, donde fue detenido y encarcelado hasta el ¡¡24 de diciembre!!

En dicha fecha, en unión de cuatro víctimas sacerdotales lo ejecutaron en las cercanías de Murcia, en cuyo cementerio sepultaron su cadáver que, posteriormente, fue trasladado a Orihuela el 9 de julio de 1939.